RESEÑAS
Un aplauso pal asador

¡Queremos más rock! En lo que va del año, alcanzan los dedos de una mano para poder contar la cantidad de recitales del ámbito “under” celebrados hasta el momento. Ahora que las inspecciones revisan hasta dentro del papel higiénico (¿ahora se acuerdan?) haciendo que los lugares no puedan abrir, los músicos tuvieron que poner manos a la obra para poder conseguir cualquier lugar “legal” para poder dar a conocer su propuesta, sin importar si es un salón, una plaza o, como en este caso, un teatro.
Apreciar un espectáculo de ésta índole, cómodamente sentado en una butaca, se puede llegar a tornar extraño, ya que por momentos se sentía esa necesidad adrenalínica de ponerse a saltar al ritmo del quinteto, de poder tomarse una cerveza mientras se disfruta del mismo, o tirarse por ahí a ver el escenario. Pero bueno, ahora que hay que ser “correcto”, hay que adaptarse a las modalidades necesarias, no sea cosa que te clausuren el lugar diez minutos antes de tocar, ¿no?
Bueno, basta de enojo, y vayamos de lleno al espectáculo. Con un gran puesta en escena (el escenario estaba decorado con tiras de chorizos, jamones y una media res), además de un disparatado vestuario para los músicos (el guitarrista vestido como Luann Van Houten -la madre de Milhouse-, el bajista de jugador del Milan, el baterista de cocinero, el tecladista de Mozart, el cantante de mujer, el encargado de los vientos con traje) la banda se encargó de dar una imagen bastante chiflada y divertida.
¿La música? Imagínense si FRANK ZAPPA y MR BUNGLE se encontraran con el staff de ”Todo por dos pesos” y deciden armar una banda parodiando a otros artistas, donde además de una gran base musical (imperdible las presentaciones personales que hicieron cada uno de los integrantes al final del show, demostrando sus dotes musicales), se combina con humor del más bizarro.
Por momentos se recordó a NIRVANA con una extraña versión de ”Smells like teen spirit”, en donde el cantante reclamaba a gritos por un papel. Hubo tiempo para ser PIMPINELA por un rato en ”Pega la vuelta”, donde en la misma se cuela ”Magos espadas y rosas” de RATA BLANCA (¡con los punteos y todo!), incluyendo imágenes de ambos grupos y cambiando posiciones de lugar (por momentos si nos fiamos por el video, LUCIA ocupa el lugar de BARILARI).
Pero no sólo de música se trata el espectáculo, ya que durante el mismo se pueden ver distintas performances en escena. Extrañas promociones (un video que vendía un kit para ser FERNAN MIRAS en “Tango Feroz”), una actuación de un pseudo CHARLY GARCIA (emulado por el tecladista) y montones de gags –“Primero PAPPO, después El Papa… ¡cuidado PIPO!”– fusionados con funky, algo de punk, candombe, hardcore y los estilos que se imaginen, dan como resultado una parrillada más que aceptable, para comer sin límites ni temor a engordar.
Cinco tenedores de aceptación
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