Soy Elvis

Carlos Gutiérrez (John Mc Inerny) es todo un personaje: convencido que vino al mundo con el don de poseer la voz de Elvis Presley, dedica su vida a ser lo más parecido posible al Rey del Rock and Roll. Y, en su caso, lo más parecido posible es usando el tiempo libre que le deja su empleo en una fábrica de cocinas para animar fiestas o noches de bar imitando al mítico cantante estadounidense.

Pero la historia del protagonista de “El último Elvis” (ópera prima de Armando Bo nieto) presenta más elementos, y el más importante es que Carlos tiene ex mujer (Griselda Sicialini) e hija (Margarita López) que mantener y criar, y su forma de ser le hace más difícil lo segundo que lo primero. El núcleo del film, entonces, es el relato de un hombre particular con sueños de estrella que jamás, ni desde el peor de los pozos, resignará. “Cuando creas mucho en algo, tenés que ir hasta el final. Los que no lo hacen son infelices”, le dice él a su hija, obviamente llamada Lisa, en el único momento en el que le enseña algo.

Merece una mención especial las interpretaciones de la tríada de actores que animan la película, pero fundamentalmente Mc Inerny que parece nacido para este papel; todo en él es impecable, desde su expresión de adulto en su propio mundo hasta su apariencia imponente y, sobre todas las cosas, su imitación de Elvis arriba del escenario. De seguro, más de uno que lo vea entonando “Unchained Melody” se verá impulsado a aplaudirlo. No es para obviar, al respecto, el dato de que Mc Inerny debuta aquí como actor, ya que en realidad es arquitecto y además tiene una banda tributo llamada Elvis Vive en la que, por supuesto, se encarga del micrófono.

“El último Elvis”, en principio, muestra todas las características para entender que se trata de una historia de humor; de por sí, todo imitador de Elvis que se parezca más a su última etapa que a la primera mueve a la sonrisa. Sin embargo, rápidamente, se descubre que si bien hay momentos de gracia en el film, los mismos son, más bien, trágicos. A fin de cuentas, si de tragedias se trata, el rock and roll algo sabe. Y, si no, preguntémosle al Rey.

* “El último Elvis” se proyecta en Arte Cinema, Espacio INCAA Km 0 Gaumont y Premier.