Solo como ellos saben

Tras celebrar 30 años de carrera, Bad Religion compuso “True north”, un disco rápido y ganchero que emocionará a sus  fans.

Los tres adelantos “Fuck you”, “True north” y “Vanity” habían dado una pauta de lo que se vendría: canciones veloces y melódicas que retrotraían al viejo sonido de la banda. El propio guitarrista y productor Brett Gurewitz lo había anticipado avisando que las composiciones apenas superaban los dos minutos. Necesitaban de un disco fuerte para olvidar algunas críticas de su anterior álbum, “The dissent of man” (2010).

Y vaya si lo lograron. Con estas 16 nuevas canciones en solo 35 minutos recuperan esa energía y frescura que en su placa previa habían perdido. Esto no quiere decir que “The dissent of man” haya sido un mal disco, sino que caía en algunos pozos que generaron cierta oposición. En cambio, “True north” es un álbum que jamás sufre esos vaivenes ya que mantiene una estabilidad compositiva pareja.

A lo largo de los minutos se comienza a percibir ciertas reminiscencias a su antiguo sonido, poniendo especial énfasis en álbumes clásicos como “Suffer” (1988), “No control” (1989) y “Against the grain” (1990). Por supuesto,  solo tratan de recrear ese espíritu.

Desde el comienzo con el tema “True north” marcan la línea musical de la placa. El recurso de la velocidad es utilizado reiteradamente, aunque siempre por necesidad y no por limitación, como suceden con muchas bandas del género. Esta y otras canciones como “Robin Hood in reverse”, “Fuck you”, “Vanity” y “Dept false of hope” tienen destino de clásicos, especialmente a la hora del vivo.

En medio de esa adrenalina aparecen melodías distintivas y en las que bajan un par de cambios. Allí Greg Graffin le cede la voz a Gurewitz para cantar la oscura «Dharma and the bomb». “Hello cruel world” suena con ese medio tiempo tan característico de Bad Religion.

En definitiva, una placa que tiene todos los condimentos que se esperan de esta influyente agrupación: buenas melodías, velocidad y contenido político. En nuestro país es una banda muy querida y respetada, y con este disco generarán aún más fanatismo.