Resistiré

La noche comenzó con SUPERSTICION, banda de rock tradicional/clásico con una muy buena base pero con una gran falta de prácticas en la sala de ensayo. Prometen más de lo que muestran con canciones que bien podrían ser en un futuro (por qué no?) hits rockeros.

En una suerte de alternar el rock con el reggae, le tocó el turno a SINSEMILLA, que hace esta música originaria de Jamaica desde hace más de nueve años. Entre otras canciones típicas reggaeras (como la que en estos días hizo famosa KAPANGA, “Fumar”), se encontró un homenaje a PINK FLOYD con el reconocido tema ”Another brick in the wall”, obviamente adaptado al estilo SINSEMILLA.

Para terminar el set de bandas soportes y siguiendo con el orden en que venían, salieron al escenario la segunda y última banda de rock L’ALDEA. Como para quedar acorde con la presencia entre el público de PITY ALVAREZ (ex VIEJAS LOCAS y actual INTOXICADOS) y el baterista de LOS GARDELITOS, HORACIO ALE, el rock & roll se hizo más presente que con SUPERSTICION. Fue ahí el momento en el que el campo se inundó de “stones” bailando al compás de la armónica, que era la vedette de la banda.

La Resistencia De Cemento

El lugar estaba prácticamente completo, con una mezcla de flequillos stones y rastas jamaiquinas que hasta hace un rato sólo les prestaban atención a “sus” grupos. Pero cuando salió a tocar la banda originaria del barrio de San Martín, a ninguno de los espectadores les importó la diferencia musical que los había “separado” hace unos minutos atrás.

Con la excusa del festejo de sus diez años arriba de las tablas, RESISTENCIA SUBURBANA también aprovechó el momento para presentar oficialmente su nuevo disco La unión verdadera. Con una Quilmes de litro en la mano, su cantante salió a acompañar los acordes del primer tema.

Más allá de que sus temas cuenten diferentes historias, sus canciones rondan en torno a lo que la banda tiene como referente: la legalización de la marihuana “para su uso medicinal en pacientes terminales” (textuales palabras de la banda), la proclamación de los derechos humanos y la lucha contra la corrupción.

Desde su estilo musical, RESISTENCIA SUBURBANA asegura diversión y al mismo tiempo propone una concientización de lo que está pasando en el lugar (el país) donde viven ellos y sus seguidores. Con una excelente coordinación entre los músicos y el agite de “la hinchada” ofrecieron un show más que recomendable y sumamente atractivo.

En el día de su cumpleaños, el regalo nos lo hicieron a nosotros.