Promisorio debut

Por Daniel Grosso | 9 junio, 2005

¿Conformes? Mmm…

Antes del show de SUBOSTOVSKY y compañía, subieron a escena los chicos de LORD KRAVEN. A eso de las 2:20hs iniciaron su descarga. Durante casi media hora se despacharon con cuatro canciones. A su power metal épico (en la vena de RHAPSODY, BLIND GUARDIAN, entre otras), le faltó un poco de fuerza y bastante de originalidad.

Temas como “Amo de tu ser” y “La batalla de gorgul” no terminaron de convencer, como así tampoco la versión de “Painkiller”, el clásico de JUDAS PRIEST. Si con tremendo himno, la gente no se enganchó, por algo debe haber sido, ¿no? Pero seguramente la agrupación de Tapiales mejorará y podrá brindar mejores actuaciones en un futuro.

De estreno

Tras unos minutos de espera se corrió el telón del anfiteatro. De esa manera, los METAL PROJECT comenzaron con su set, sin ninguna intro previa (algo tan común en este estilo). Los cinco músicos irrumpieron en las tablas con “Siniestro poder”, la canción inaugural. Tras el tema, GUSTAVO OCHOA saludó al público y comentó que éste era el debut oficial de la agrupación.

De las tres canciones de QUEMAR que regalaron, dos sonaron en forma continúa: “Todo es esperar” y “El alcohol va a recordar”. Para ambas melodías, el vocalista tenía los machetes de las letras pegadas en el piso. Esto indudablemente le hacía perder interpretación. Su mejor entonación se podía apreciar cuando alejaba su vista del papel.

OCHOA agitaba continuamente a los presentes para que participen durante las canciones. Esto sucedió en “Ángeles negros”. Los puños de unos cuantos se elevaron hacia arriba, aunque no tantos como GUSTAVO hubiese querido. No fue un público demasiado efusivo, pero se puede entender desde el lado en que conocían poco y nada del nuevo material.

Y sí!!!, hubiera estado bueno…

La placa debut del proyecto cuenta con vocalistas invitados, como WALTER MEZA (HORCAS), IVAN SENSION (JERIKO) y SAUL BLANCH (ex RATA BLANCA), entre otros. Éste último se encargó en el CD de “Dame una señal”. Siguieron con dicho tema, pero desde la voz de OCHOA, ya que no concurrió ninguno de ellos. La misma fue dedicada por SUBOTOVSKY (la descosió durante el solo) a su padre, recientemente fallecido.

Antes de proseguir con el concierto, hicieron la presentación de cada uno de los integrantes. Todos con un prontuario importante. Pasaron “Encuentro final”, “Careta enferma” (un medio tiempo con un gancho súper rockero) y “Sr. Rock ‘n’ roll” (hard rock movido). El sonido en general fue bueno, sin embargo, podía haber estado mejor.

Hacía tan sólo un día que el álbum estaba en la calle, y ADRIAN, orgulloso, le ofrecía a los concurrentes la placa para que lo compren tras el show. También le agradeció a la compañía 4G DISCOS por editar la producción y por organizar dicho evento. Al grupo se lo vio contento por lo realizado. Luego siguieron hablando a través de sus instrumentos. “Dura ansiedad” fue la composición elegida.

Como toca el flaco

Si había un momento esperado en el concierto, ese era el virtuosismo a solas de SUBOTOVSKY. Eligió una pieza clásica de JOHN SEBASTIAN BACH para mostrar sus cualidades. Como no podía traer a los 70 músicos de la Orquesta Sinfónica Nacional del Teatro Colón, (con la que grabó su disco solista “Fin de siglo” -2003-, editado por Nems), utilizó una pista para suplantar todo ello.

El cierre llegó, tras 70 minutos de buena música, con el temazo de QUEMAR “Furia sin piel” y con el posible himno de METAL PROJECT, “A pura sangre”. “¿Como la pasaron? ¿bien?”, preguntaba OCHOA. La gran mayoría respondió favorablemente, aunque no había parecido. Cuando la gente comenzó a dejar el anfiteatro, se encontró con una llovizna muy molesta, que lograba poner de mal humor a cualquiera.

Fue un recital interesante, aunque el sentimiento de muchos era de vacío. Digamos que algo faltó. Quizás un poco más de emoción o de fuerza por parte de la banda, o tal vez, el conocer poco las canciones les dejó ese sin sabor al público. En definitiva, las futuras presentaciones harán que el grupo se acomode más en escena y que la masa comience a encariñarse con ellos.