Para pocos

Ante unas cien personas, Benediction, el quinteto que lleva más de veinte años de carrera, y supo tener como frontman a Barney Greenway de Napalm Death, se presentó por primera vez en Buenos Aires, en marco de la gira de presentación de su último trabajo, “Killing Music”.

Luego de las interesantes presentaciones de Bloodfriend, Paganos y Zoofilia, el quinteto salió a escena, con Dave Hunt al mando de las voces, secundado por Darren Brookes y Peter Rew en guitarras, Nick Baker en batería, y Frank Healy en bajo.

Dieron comienzo al show con la misma intensidad que una banda que cierra el escenario principal de un festival extremo colmado de gente, pero ante unos cien argentinos locos.

La seguidilla comenzó con “The grey man”, de su último trabajo, y el calor de a poco se empezó a notar en el lugar. Luego de sufrir algunas modificaciones edilicias, Súper Rock, al parecer, comenzó a sonar un poco mejor. Esperemos que con la obra terminada, los problemas de sonido que tuvimos que soportar en Obituary y Deicide sean parte del pasado.

Dave se la pasó tomando cerveza y festejando todo lo que la gente hacía; parecía un nene con juguete nuevo en el escenario. Con un gran despliegue escénico, este rubio inglés supo llevar adelante el show sin inconvenientes.

Con los presentes chocándose contra las vallas y a los saltos cerca del escenario, el quinteto supo pasearse por canciones de su discografía, tales como “Nothing on the inside”, “Jumping at shadows”, “Suffering feeds me”, “Subconscius terror” y “Magnificant”, entre otros. A lo largo de una hora nos brindaron una gran artillería de death metal.

A Nick por momentos se lo notó algo molesto con el sonido de sus retornos, ya que no paraba de llamar al sonidista mostrando sus baquetas al aire. Aunque este desperfecto dejó medio preocupado al baterista, afortunadamente no se notó en el sonido.

Benediction dio su primer show en Buenos Aires. En una gira que también los llevó a la ciudad de Córdoba, dejaron una muy buena impresión en el público local. Esperemos que en una futura visita la concurrencia sea mayor, aunque dejaron bien en claro que eso no opaca su performance.