Nuevamente entre nosotros

EL SEPULCRO PUNK, a cinco años de haber lanzado su primer disco “Argentilandia”, editó su esperada segunda placa, a fines del año pasado. La misma se llama “Living la cuerda floja!” y está compuesta por 12 nuevas canciones. Esta fue la excusa para que EL SEPULCRO PUNK retorne al circuito.

De la otra esquina

El show estaba anunciado para las 22 hs. Pero recién para las 0:15 hs. se habilitaron las puertas al público. Desde ese momento, la gente fue ingresando paulatinamente. Música punk variada amenizaba la espera.

Cuando faltaban diez minutos para las dos de la mañana, los montevideanos de CAMBIA LA BIBLIA comenzaron su set. Quedó reflejado claramente su amor hacia LA POLLA RECORDS, tanto desde el mensaje como del estilo musical. Sonaron canciones de su primer disco, como por ejemplo, “Cambiar”, “Carne” y “¡Ay dios!”. La placa se podía conseguir en la feria a un precio módico.

Demostraron mucha actitud y ganas arriba del escenario. Contaron con un buen sonido. También se dieron el gusto de estrenar una nueva composición llamada “Marrona”. Estuvieron acompañados por un grupo de amigos.

Hace cuanto?

El juego de luces acompañaba el ritmo de la intro (electrónica), ante una masa que observaba y escuchaba con curiosidad tal inicio. Comenzaron con dos nuevitas: “Soñar” y “Mi accionar”.

Tras estas melodías el BATRA saludó a su público y comentó que están de vuelta después de un tiempo. Y agregó: “Estamos cada vez más veteranos y más odiosos”. “Al ritmo de la muerte”, uno de los hits del grupo, continuó con la lista. Para este tema se vieron los primeros pogos.

Las nuevas canciones siguen en la misma línea, aunque el sonido ska está acentuado aún más. Además de contar con los clásicos instrumentos (guitarra, bajo, batería), le agregan a su formación un saxo. Esto hace que los diferencie de los demás grupos punks. Les da un toque de originalidad.

Siguieron con canciones viejas (“Pesadilla”, “Que más da”), como también con algunas nuevitas (“Ácido control”, “Llegará”, “Flexibilización”). Obviamente la gente disfrutaba más con los temas de su primer CD “Argentilandia” (1998), por una cuestión de conocimiento, simplemente.

Con la ayuda de amigos

Para “Expreso sudaca” subió el primer invitado, RODRIGO, en guitarra. En ese momento comunicaron que el batero de la banda no pudo estar presente y que ADRIAN estaba en su lugar. Los asistentes siguieron el recital de una manera muy pasiva.

El mayor pogo se vio cuando se despacharon con “Rock businnes”, una versión de “Rockaway beach” de THE RAMONES, en castellano y con una modificación en la letra. Otro canción que generó el baile furioso fue “Muerte a créditos” (según me comentaron, la intro de está composición es muy parecida a una de STIFF LITTLE FINGERS).

Luego de 55 minutos de show se despidieron repentinamente, dejando satisfechos a algunos y no tanto a otros, que esperaban algunas melodías más. Pero la noche no terminaba ahí, ya que la música seguía sonando de fondo. Tras salir del local, nos encontramos con una pelea, que acaparó nuestra atención.