Noches en el Abasto

Mientras un grupo de gente bebía los vestigios de cerveza que quedaban en los vasos de plástico de un litro (¿vieron que feo gusto que les da a la bebida?), un travesti semi desnudo bajaba rápidamente de un taxi y se metía dentro de un conventillo, mientras que de a poco la gente se iba abultando en la puerta del lugar, logrando una extraña postal de la noche de Buenos Aires en pocos minutos.

Ya dentro del teatro (una sala con sillas de plástico), la gente iba obteniendo su mejor posición esperando el comienzo del show. Cámara en mano, cerveza en boca, cigarrillos afuera, de a poco se comenzaron a escuchar los murmullos de los amigos de la primera banda, mientras los músicos ponían a punto sus instrumentos.

VELOCIDAD 22, quienes esa noche cumplían diez años como banda, y era este su show debut, brindaron un rock duro bastante influenciado por el sonido de bandas motoqueras, con guitarras ásperas y llevaderas, haciendo inevitable comparar al cuarteto con RIFF. Como no podía ser de otra manera, homenajearon al CARPO con ”Susy Caddillac”, cantada a dúo con LOQUILLO, un amigo de la banda que, según su cantante, fue quien les hizo conocer a la banda de las cuatro letras. Además, también estuvo SANTIAGO (el cantante de D´AGOSTA), quien acompañó en la versión de ”Brigadas metálicas”, de V8, cerrando su set de una manera muy favorable y festejada.

Instantes después, y con el escenario decorado con muñecos de Chuky, D´AGOSTA hizo contacto con la gente. Brindaron un sonido diferente a la banda anterior, logrado a base de una mezcla de velocidad hardcore, actitud punk, y un sonido bien rocker tirando a MOTÖRHEAD.
Con un cantante que no paró de ahorcarse con el cable, cabecear el escenario, mientras (y sin dejar de gritar por el micrófono) REYMON (bajista y hermano del susodicho) le lamía la sangre de la frente, dieron un espectáculo sencillamente brillante y rockero, no apto para almas sensibles.

Con seis años en las rutas y dos discos a sus espaldas, el grupo de Almagro la viene peleando hace bastante tiempo. Amantes del cine de terror basura y el rock and roll más asesino, todo eso se lo vio plasmado en poco más de media hora en escena. Si no me creen, denles una oportunidad conociéndolos en http://www.dagosta.com.ar.

De esta manera terminó una gran noche de rock and roll de sábado, con dos bandas que se las traen. Solo es necesario darles una oportunidad y escucharlos.