Noche de strippers, motos y rock and roll

La banda encargada de abrir la noche fue El Motor, cerca de las 2 de la mañana. Estuvieron en escena durante más de media hora, donde interpretaron diez canciones. Entre ellas sonaron composiciones propias como “Es muy tarde”, “El vino” e “Inténtalo”, y covers como «Que sea rock», de Riff y «Borns to raise hell», de Motörhead. El Motor demostró ser una banda poderosa en vivo e hizo mover la patita a más de uno.

Luego de un ínterin, el rockabilly de la mano de Boggie y sus Aceitosos irrumpió en las tablas. El ritmo de la banda es muy bueno, suenan ajustados y sus tres integrantes se destacan en sus instrumentos. Sin dudas, que es una agrupación que incentiva el baile. Pasaron“Demasiado Rockabilly”, “Johnny Bop” y “Puñalada”, junto a buenas versiones de Elvis Presley y Stray Cats. En este momento, se encuentran en pleno proceso de grabación de su primer disco.

Las dos bandas que aún restaban tocar, eran las más esperadas y convocantes de la noche. El clima que se vivía en La Casona era de mucha amistad. Había buena onda entre todos.

Pasadas las 4, subió Louder, la banda tributo a Mötley Crüe, para derrochar toda su energía. De movida con “Shout at the devil”, el público pogueaba a full y disfrutaba de los clásicos de los californianos. La nueva formación suena más contundente y heavy. Se escucharon “Rattlesnake Shake”, “S.O.S.” y “Girls, Girls, Girls”, entre otras. Durante este último, subió una stripper que hizo delirar a todos los hombres con sus sensuales movimientos. También tocaron “Anarky In the U.K.”, de los Sex Pistols.

Rockmotor cerró la noche cuando el cansancio ya se hacía notar entre los concurrentes. Estuvieron presentado su CD debut autotitulado. Ellos definen su estilo como rock crudo, rápido y pesado, punto que demuestran en sus shows en directo. Temas como “Peligrosamente Sexy” y “Máquina”, son dos claros ejemplos.

Durante ambas canciones, la bailarina volvió al escenario para realizar sus coreografías. Realizaron dos clásicos como “Highway to Hell”, de AC/DC y “Breaking the Law”, de Judas Priest. Rockmotor demostró ser la mejor banda del Iron Fest, tanto por la presencia escénica y como por la calidad de sus temas.

Mientras amanecía en la fría mañana del domingo, los ruidos de los motores calentaban la ciudad. El Iron Fest 3 había finalizado con saldo positivo, esperando que se repita en otra oportunidad.