Más sabor a pimienta

Adicciones, muertes por sobredosis, despidos y cambios en su formación; a todo esto y más han sobrevivido los Red Hot Chili Peppers en medio del ritmo vertiginoso del rock and roll. El cambio reciente es menos traumático pero no deja de ser significativo. Esta vez, por decisión personal (para dedicarse a su carrera en solitario), abandonaba la banda John Frusciante.

“Nos encontramos con una especie de arquitecto sonoro”, decía Anthony Kiedis respecto de la nueva incorporación: John Klinghoffer, no sólo en guitarra, también en piano y coros.

Klinghoffer puede no estar en los solos grandilocuentes, pero sus arreglos decoran constantemente las canciones, como el caso de “Any wants a baby”.

Su guitarra no está tan al frente como la de Frusciante; el nuevo violero es un engranaje más en la maquinaria Pepper, se ensambla perfectamente con una banda que parece haber ganado en armonía musical. Tal vez parte de ello se deba a que las vacaciones de Flea fueron muy productivas en este rubro. El bajista se reinventó como músico: estudió piano y teoría musical. Sus riffs son los que mandan en varias de las canciones. Hasta se luce con un solo de trompeta en “Did I let you know” (tema acompañado por un constante punteo delicioso de Klinghoffer) y un increíble solo de bajo en “Goodbye Hooray”.

Kiedis cada día canta mejor. Atrás ha quedado ese escaso registro vocal que apenas “rappeaba” los temas. De “By the way” a esta parte el líder se ha convertido, además, en vocalista, como demuestra en la balada “Meet me at the corner”.

Con más de 25 años de carrera, los Chili Peppers hasta se animan a reinventarse. Tal es el caso de la beatle “Happiness loves company”, comandada por el piano de Flea. “Hacé tiempo para el amor y tu felicidad”, entona Kiedis en una canción que derrocha optimismo. Una rareza, un experimento más que satisfactorio.  

Por momentos entregan lo mejor de su libreto, y por otros se animan a salirse del guión, dando resultados completamente satisfactorios. Comparaciones aparte, la nueva incorporación les sienta bien como banda. A sus ingredientes habituales los condimentan con más pimienta, sirviendo otro plato delicioso.