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Magia en el aire
The Magic Numbers se presentó una vez más en Buenos Aires ante un Niceto repleto. Repasó sus mejores temas y estrenó varios de su próximo disco, de inminente edición.
“Este grupo de canciones es el mejor de nuestra carrera”, anticipaba The Magic Numbers en una entrevista días antes de esta presentación. Y si bien la promoción de un nuevo material es un lugar común del artista, los estrenos que se escucharon en la noche de Niceto fueron algunas pinceladas del potencial del próximo disco.
El comienzo fue bien intimista con “The pulse”, tema que también abre su último álbum “The Runaways”. Pero fue el pulso del bajo de “Take a chance” el que se metió en la piel de los presentes para hacernos mover, para ayudarnos a sacarnos el frío durante prácticamente dos horas. Con “The mule” tal vez se haya dado el momentos más “rockero” de la noche, con un solo expresivo, y una pequeña zapada que se extendió por algunos minutos. Romeo Stodart estiró sus cuerdas pero sin salirse de la prolijidad, que es también parte de su marca.
“La última vez que estuvimos aquí estábamos a punto de hacer el siguiente álbum. Ustedes nos enviaron al estudio con un subidón muy alto. En serio, fue uno de nuestros mejores shows. Era exactamente lo que necesitábamos, que nos dieran un empujón para entrar al estudio. El show de hoy es una celebración porque terminamos el disco. Gracias. Así que vamos a hacer un par de nuevas canciones”. Así introdujeron lo que sería el primer estreno: “Roy Orbison”.
“No sean tímidos, esta noche somos todos amigos aquí”; así presentó Romeo ese hit irresistible que es “Love’s a game”, tema que los puso en el mapa para gran parte del público presente. No es un detalle menor el humor que derrochan los Magic Numbers arriba del escenario; no solo conectan con su público desde las canciones, sino que entre una y otra interactúan constantemente.
Los elogios corrían hacia arriba pero también hacia abajo del escenario: “Amamos cuando cantan con nosotros”, sentenció el cantante y guitarrista antes de “I see you, you see me”, la balada en la que hermano y hermana (Michele Stodart) mejor juegan con sus voces. En esta interacción continua, los Magic Numbers bromearon con una canción cuya letra está compuesta sólo por nombres de bandas: “Estábamos tan borrachos que son sólo dos acordes”. Un experimento que aportó aún más a esa comunión creada con el público.
Se intercalaron más estrenos entre los cuales se destacó la potente “Shot in the dark”. Ensayada en su anterior visita a la Argentina esta vez sonó más pulida. Recordemos que los Magic Numbers nos visitaron hace menos de un año, en octubre de 2012. La proximidad de su última aparición no impidió que Niceto esté completamente colmado en su capacidad.
“Love me like you” cerró bien arriba el tramo principal del show. Tras un breve intermedio llegaron los bises y otro momento intenso con la balada “Hymn for her”, y el final en el que de vuelta hicieron bailar al público, en este caso con “Mornings eleven”.
Sonando realmente ajustados y sin excesos de demagogia, The Magic Numbers conectaron con buenas canciones, pero sobre todo con un estado de ánimo que se contagiaba en el aire.
*Fotos por Guillermo Coluccio
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