La magia de VIRUS

Es cierto que hace más de 15 años que FEDERICO MOURA no está al frente de Virus, como así también es cierto que VIRUS marcó a fuego toda una época del pop/rock nacional. Quizás estos dos hechos se hayan conjugado para dar lugar al hermano de FEDERICO como cantante y líder de la formación actual de la recordada banda de los ’80.

Pero, ¿cómo despegarnos de la clásica voz de FEDERICO? ¿Cómo ir a ver a VIRUS y no escuchar los grandes éxitos ya inmortalizados por la banda? Peleando siempre con esas limitaciones, las presentaciones del mayor grupo pop que dio la Argentina en la década de los ’80 siguen. El jueves último regresaron a Córdoba después de muchos años. Y su paso se hizo sentir.

Por más que la entrada fuese realmente muy cara ($ 20) y la espera previa alcanzara las 2 horas, VIRUS salió a la escena de un selecto bar de la zona norte de la ciudad alrededor de a una de la madrugada, con un excelente marco de público que colmó el lugar. Con el escenario y la iluminación en naranjas predominantes, invocaron a la nostalgia en primer lugar con “Pecados para dos”.

Con MARCELO MOURA de muy buen humor, el repertorio se hizo todavía mucho más positivo. Luego siguieron temazos de la banda como “No va más” y el cuasi himno de aquellos tiempos “Imágenes Paganas”. Los saludos recién llegaron en el cuarto tema de la noche, en este caso, un estreno. “Mondo Bongo” le da título a la canción que, de forma esperada, está dedicada al desaparecido líder.

Las emociones siguieron cuando se escuchó “…recordando tu expresión…” y las casi 300 personas que allí se encontraban se pusieron melancólicos con las frases de “Pronta Entrega”. Los recuerdos siguieron de la mano de “Destino Circular”, “Amor descartable”, “Superficies de Placer” y la romántica “Oro en Polvo”.

Para esta altura, MARCELO ya se había metido al público en el bolsillo, que le convidaba cigarrillos y cerveza constantemente. También compartía miradas con su hermano, el guitarrista JULIO MOURA.

Aprovechando este buen momento, los “chicos” de Virus siguieron con otro adelanto, ésta vez “con un tema que no tiene nombre”. Y presentaron una canción pegadiza, muy pegadiza y que no se aleja al estilo de la banda. ¿Quién esperaba algo distinto?

El final fue a puro movimiento y los presentes rememoraron viejos tiempos bailando y bailando. Con “Garage”, “El Probador” y “Hay que salir del agujero interior” se preparó todo para el clásico de clásicos “Wadu Wadu”. Pero la ovación fue tan grande que el bis se prolongó 3 temas más.

Con “Todo Gira”, “Luna de Miel” y “Carolina”, VIRUS cerró un show que estuvo dominado por el recuerdo y la añoranza de los años 80. Sin dejar de ser una actuación increíble, se bajó la persiana hasta otra nueva cita con el ayer…