SHOWS

Hasta morir

Por  | 

Los Crudos volvieron a Buenos Aires y agotaron las dos funciones en Niceto Club durante un fin de semana tan veloz como intenso.

Martin Sorrondeguy se para en el escenario y si uno no conociera a Los Crudos nunca sospecharía que de ese hombre tímido y frágil saldría una ráfaga de veneno durante los siguientes 35 minutos. El mito es demasiado grande para que pase desapercibido: un par de latinos antisistema que logra pegarla en la tierra del capitalismo más extremo, y todo esto cantando en español. Un disco, un par de singles y split y un recordado show con Fun People en los 90 sirvieron para agotar dos Nicetos. ¿Cuál es el secreto? Las ganas del público de verlos, por un lado, y el económico precio de las entradas ($50), por el otro. Realmente no es ninguna ciencia: si el precio es adecuado, la gente responde.

El discurso de la banda es anti racismo, anti capitalista, anti homofobia. Ráfagas de menos de un minuto y medio como «Tiempos de la miseria», «Tu lo enseñaste», «No estoy convencido» o «Achicados». Todas son declaraciones de principios que la repleta sala de conciertos vive, tal vez, el pogo y mosh más intensos que alguna vez haya visto. De adelante a atrás, de costado a costado, es una marea de gente volando. Solo los que están en la parte superior están ajenos al sudor, las lágrimas y la violencia.

La banda es la voz de los que están abajos: hay insultos a los gobiernos de turno, reinvindicacion a la mujer y pedido de justicia por la Sala Alberdi. Martin entrega su micrófono para que los chicos proclamen las cosas a viva voz. Y también él lo hace en canciones como en «Spic Band», la única en inglés que cantan, irónicamente, a propósito. Pero, sin duda, «Asesinos» y «Crudo Soy»  son las dos más intensas de una noche no precisamente muy calma.

35 agotadores minutos. Una veintina de temas y cuerpo y alma dejado en el escenario y en el piso. Hardcore.

 *Fotos por Guillermo Coluccio

[slideshow id=129]

azafatodegira.com

Tenés que estar logueado para escribir un comentario Iniciar sesión