RESEÑAS
Fiesta pordiosera

A las 21.00 hs. se abrieron las puertas del lugar ubicado en pleno barrio de Once, y la larga cola de personas que aguardaba en la esquina comenzó a ingresar. Adentro un cartel rezaba “Prohibido el ingreso con bengalas”, lo que sonaba bastante extraño, y que por supuesto no fue respetado. Desde hace tiempo y cada vez más, las bengalas son las grandes protagonistas de los shows.
Una especie de telón negro tapaba el escenario, en la pantalla se veían imágenes de un recital de los ROLLING STONES, y de fondo sonaba GUNS AND ROSES. Lentamente el recinto se fue llenando de gente -y de banderas-, y todos aguardaban pacientemente el arribo de la banda. Minutos antes de las 22.00 hs. la paciencia se fue agotando y los cantitos alentando a la banda se hicieron oír. Y ahí nomás, los JOVENES PORDIOSEROS salieron a escena con “Descontrolado”, para el delirio de los presentes.
Le siguieron casi de corrido “Todo me alcanza”, “Que se siente estar tan sola”, “105 y 3” y “Te la regalo”. Recién antes del sexto tema, “Me quedo con el rock”, TOTI (voz y guitarra) saludó a sus seguidores: “Bienvenidos che, muchas gracias por haber venido y por el apoyo de siempre. Estamos presentando “Vicio”, che!”.
Todos los temas eran coreados y festejados por igual. El apoyo incondicional del público se sentía en el aire, muchas veces viciado por el humo de las bengalas. Desde arriba uno no puede creer como hacen para soportar tanta humareda, y hasta alguna que otra quemadura. Pero para los pordioseros es una verdadera fiesta y lo viven de esa manera. Es difícil de entenderlo si uno no está inmerso en esa realidad, en ese sentimiento. Pero más allá de tener algunas objeciones con respecto al uso de pirotecnia en los recitales, no deja de ser admirable la devoción y la garra que le ponen estos pibes.
“¿Les costó mucho la entrada, che? Esta banda hoy va a hacer 30 temas para ustedes”, anunció TOTI ante los efusivos aplausos de los presentes. Y acto seguido sonó “Qué haces?”, para luego enganchar con “Satisfaction” de los ROLLING STONES.
Promediando la mitad del show, el cantante se cambia la remera por una que tiene su nombre en la espalda y el número diez. Se arrastra por el piso, se trepa por los parlantes. Después se sienta sobre el escenario y pacientemente lee las banderas que flamean abajo. Tocan “Nunca me enseñaste” y nuevamente vuelve a desplegarse una bandera gigante que cubre casi a la totalidad del público.
Luego OMAR CHABAN, dueño de casa, sube al escenario y le murmura algo al oído a TOTI. Y este pide: “Aguanten con las bengalas, así la pasamos bien”. Parece que algunas personas tuvieron que ser trasladas al hospital por quemaduras. Pero el show debe continuar, y así fue. Como invitado, FACHI (VIEJAS LOCAS) fue recibido efusivamente por el público. Y con “No la quiero dejar”, corte de difusión del nuevo disco, los músicos se retiraron del escenario, dejando paso a la proyección en la pantalla del video de dicho tema.
Luego de unos minutos de descanso, los JOVENES PORDIOSEROS retornaron para tocar los últimos diez temas de la noche. “Gracias por venir”, “Barrio”, “Esto no se ve”, “Veneno”, “Solo y duro” y “Chicos de barrio” fueron los primeros que sonaron. Luego subió MANU (voz y guitarra de MANCHA DE ROLANDO) para tocar “Noche”. Y para el final, tras dos horas y media de show, sonó “Cuando me muera”.
“No aplaudan, este es un aplauso de nosotros para ustedes”, fue el cierre de la noche en palabras de TOTI. Y los aplausos se fundieron en uno. Ambos –público y músicos- se lo merecían.
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