Fan

Los fanáticos siguen siendo el motor de ese bosque mágico del rock, a pesar que se halla convertido en un lugar casi impenetrable. Pero por más obvio que parezca, parece que muchas personas todavía no lo entendieron.

Los seguidores y admiradores de GUILLERMINA y de INVENCIBLES fueron los que lograron crear el espíritu festivo que todo recital debe tener. Sí, debe tener, porque de lo contrario nada diferenciaría una grabación de una presentación en vivo.

A pesar de las diferencias de géneros, las dos bandas y sus públicos pueden convivir para crear el festejo de un recital, como el vivido en el domingo pasado en El Teatro Flores. Y esta capacidad de cohabitar se mezcla con la necesidad de supervivir después los recientes cierres de locales del under.

Con un video de El Fantasma de la Ópera de por medio, GUILLERMINA arrancó su set de casi dos horas con “Rabia”0 y “Como una paranoia”. La banda producida por PABLO ROMERO -de ARBOL- en sus dos trabajos (“Guillermina” de 2001 y “Ardeimperios” de 2004) parece escapar del cartel “Made in Haedo”. Un rock con claras influencias de GUNS N´ ROSES se entremezcla el espíritu de la canción de protesta de los sesenta, todo en la voz de GERARDO “CHORY” BERISSO, especialmente en los covers de “Welcome to the jungle y “Cantares”.

En el repaso de su discografía, GUILLERMINA mostró algunos temas nuevos, entre ellos “Alma”, dedicado a ROMERO, que participó en la canción “Jardines del rey”.

“Folkdolor” fue el ejemplo de la participación del público; los fanáticos que cantan cada tema y escuchan atentamente a lo que dicen sus ídolos. En este caso, GABRIEL BERISSO (guitarras), DANIEL SUAREZ (bajo), SANTIAGO BEMPOSTA (batería) y JUAN PABLO CARUSO (teclados). El único bis, “Qué haremos”, fue el momento para que la banda diera su última nota y recibiera los últimos gritos de fans que no llegaban a cubrir la totalidad de la pista de El Teatro.

Es tan solo rocanrol

INVENCIBLES tuvo una difícil tarea: llevar los acordes de su rocanrol a pesar de los problemas de sonido y un público mermado considerablemente que llegaba a las 600 personas.
Los seguidores “invencibles” llegaron desde el fondo, con globos y papeles en sus manos, para estallar en el primer tema: “Paraíso”.

Con escalas en la voz que parecían recordar a los mejores tiempos callejeros, COLO continuó, a pesar de las fallas de sonido, con “Como ayer”, “Depredando” y “Cimientos”. “Hasta el cielo” fue el tema nuevo que presentó la banda compuesta por ARIEL (batería), ALE (guitarras y coros), EMMA (bajo), DIEGO (guitarra) y ADYLON (percusión).

Durante los últimos dos temas, “Mi pena” y “Desencantado”, en la pantalla se proyectaba la frase “Sólo gracias a nuestros brazos la magia llegará y su encanto a este bosque devolverá”. Ustedes, señores feudales que creen tener la llave de lo mágico y habilitado, algún día pueden quedar atrapados en páramos extraños. Y los fanáticos y sus ídolos estarán libres. Quieren y realmente pueden estar. Sin limitaciones.