De milagro en milagro

“El Milagro Dance” constituye la segunda parte del original proyecto en el que se ha embarcado el músico: editar 60 temas en formato no convencional. Este último trabajo es el sucesor de “El Milagro del pop”; ambos fueron editados en formato digital y pueden descargarse gratuitamente de la web oficial de Leo. Su último milagro contiene seis canciones: tres de su autoría y tres covers. En su sitio, el artista lo describe como un disco conceptual inspirado por su visita a lugares paradisíacos, e invita a sus fans a realizar remixes de sus canciones y publicarlos en el mismo medio.

Tras la proyección de “La Caja Boba”, una película de realización independiente, el ex Avant Press sale a escena vestido de rojo. Abre el show con “Electricistas”, en el que se lo notó con mucha energía, y tal como expresó al final de la canción, “con muchas ganas de volver a cantar”. Lo sucedieron “Amor al Arte”, “La Música es lo más”, “Mañana quien sabe” y “Corazón”. Para ese momento, parte del público no ha resistido mantenerse en sus sillas y se encuentra bailando frente al escenario.

Luego de cambiar su vestuario y tomar la guitarra, en la segunda parte del show hizo sonar algunas canciones acústicas, entre ellas la reconocida “Cuarto Creciente”.

Hacia el final se escuchó una inédita versión reggaetonera de “Morrissey” y de “Como tú”. Para la primera, sube al escenario Dr. Reggaeton, acompañado por un grupo de bailarines. Para la segunda, Princesa, una cantante que en su Myspace define su género como hip hop/ reggae y ritmos africanos.

En la tercera parte del recital, tras volver a cambiarse de ropa, vuelve al pop electrónico con “Pasty Party”, otra canción de “El Milagro Dance”, protagonista de la noche. También repasa los éxitos que lo hicieron sonar en radio, tales los casos de “Reírme más” y “Tesoro”.

Llegando a la hora y veinte, Leo cierra el show con una lluvia de papelitos plateados mientras invita a su público a continuar la fiesta abajo del escenario. Un recital completo, con sorpresas, invitados, y un Leo García que se mostró muy enérgico y agradecido con su público.