RESEÑAS

Comenzar de nuevo

Por  | 

Más de dos mil personas se acercaron al Teatro de Flores para presenciar lo que fue el debut de Jauría en Capital Federal. Con localidades agotadas, la banda supo satisfacer las expectativas generadas y brindarle un fiel recuerdo a aquellos fanáticos de Attaque 77 que quisieron volver a oír sus canciones en la voz de Ciro Pertusi.

Antes del comienzo del show, la memoria emotiva del público se hizo presente entonando “podrán pasar mil años, verás muchos caer pero si nos juntamos no nos van a detener”. Cerca de las nueve de la noche se abrió el telón y en la pantalla se pudo ver el backstage y el video clip de “Indios Kilme”, para dar lugar a que los músicos copen el escenario.

Al igual que en su disco debut, “Tren” y “Ascenso” fueron los elegidos para dar el puntapié inicial. El sonido no fue del todo bueno en el comienzo; las guitarras casi ni se escuchaban, pero todo fue tomando forma a medida que avanzaba el show. Pertusi, que lucía una remera con un logo similar al de Thundercats pero –lógicamente- con un perro, rompió el hielo: “Muchas gracias, se ansiaba mucho este momento”. Luego le llegó el turno a la primera de las diez canciones de Attaque 77 que se fueron mezclando con las nuevas: “Caballito de Hierro” una oda a la bicicleta, otro de los fetiches del cantante.

Más allá de los problemas iniciales que hubo con el sonido, la banda sonó muy afianzada. A esta altura nadie pone en tela de juicio la calidad de Ray Fajardo como baterista, y los que no conocían a Mauro Ambesi comprobaron en vivo lo que el disco adelantó: su bajo se complementa muy bien con la batería. Esto, sumado a las guitarras de Pichu Serniotti y a la ya más que familiar voz de Ciro Pertusi, sirvió para dejar contentos a todos los presentes.

Antes que empiece “Austin”, Ciro se despojó de su guitarra para cedérsela al primero de los dos invitados de la noche,  Maikel de Kapanga, que se volvió a hacer cargo de las seis cuerdas sobre el final del recital. Por otro lado, si bien muchos esperaban que el segundo invitado fuese Federico Pertusi, el cantante anunció que su hermano prefirió no estar en esta ocasión, y presentó a Sebas Ambesi, hermano mellizo de Mauro y ex guitarrista de De Romanticistas Shaolín´s, para interpretar la versión canina de “Religionaré”.

Otro de los condimentos que tuvo la noche fue el anuncio de la filmación en vivo del video clip de “Tosco”, pero cuando terminaron de tocarla, Ciro dijo: “Parecen momias, muchachos. A ver si se mueven un poco más”, y la rehicieron para captar la excitación (¿espontanea?) del público.

A lo largo de las dos horas que duró el show, además de las canciones que integran el disco de la banda, sonaron solamente temas de  Attaque 77. Aquellas que no rotaron intensamente en las radios pero que se relacionan con la faceta más íntima del autor, como “Piscis”, “Ángel”, “Áspero”, “Onírico”, “Canción inútil”, “El Perro” y “Donde las Águilas se atreven”, entre otras.

Cuando ya quedaba poco de recital, los cuatro se retiraron para volver vestidos de obreros a interpretar las últimas canciones de la noche. Como era de esperarse, el final fue con “La jauría”, y los músicos invitaron a sus más que contentos “mestizos” a seguir el festejo en El Roxy.

1 Comentario

Tenés que estar logueado para escribir un comentario Iniciar sesión