CARAJO, de ida y vuelta

“¿Si se te acabara el tiempo, que es lo primero que harías hoy?”, nos grita CORVATA en “Matarutinas”, tema que abrió el show de CARAJO pasadas las diez de la noche, y frase que se convirtió en el lema y en el hilo conductor de la cuarta edición del festival carajero.

Porque CARAJO es así. Desde que el grupo se formó en el 2001, siempre que puede, convierte sus presentaciones en una especie de feria rockera en la que confluyen no sólo la música de la banda sino que también otros medios de expresión independientes, como son los fanzines, el diseño de indumentaria, feria de discos, tattos de henna, etc. Actividades que tiñen de un matiz diferente la previa de los shows: de la espera y del no hacer nada se pasa al hacer algo en un espacio que permite un ida y vuelta entre la gente; un espacio para intercambiar y, porque no, generar nuevas ideas.

“Yo estoy desde temprano… y si, me gusta todo esto porque conozco a gente nueva, la paso bien, es algo más que un show de música, no sé, me gusta”, nos decía un flaquito quinceañero que estaba en la barra del primer piso, esperando a que le entreguen la remera que había dejado para que se la stencilearan con el loguito de la banda. A su lado estaba su novia, con una bolsa de juguetes que había llevado para colaborar con la fundación APAER (Asociación de Padrinos de Escuelas Rurales). “Es la primera vez que vengo. Me parece re piola la idea de venir a disfrutar un show de rock y a su vez ayudar al que lo necesita. Es hora de que muchos se saquen la careta y hagan lo mismo”.

Abajo, el escenario despedía el show de PERRO VIEJO, banda punk de Neuquén que fue soporte y que inauguró el ruido en la noche que transpiraba espíritu adolescente por todos los rincones.

El cierre de la feria lo inauguró el esperado show de CARAJO, post muestra en pantalla gigante de las respuestas que los chicos (y algún que otro personaje escrachado en la puerta del Teatro), dieron sobre la pregunta temática de la noche.

“Salvaje”, “Atrapasueños”, “Triste” “De frente al mar” y “El vago” fueron algunos de los temas del show, que repasó gran parte de la discografía de la banda y que incluyó covers como “Ángeles Caídos” de ATAQUE 77, y “Fucking Hostile” de PANTERA, tema que mechado con “Ironía” y “Noche”, dio como resultado uno de los momentos nü-metaleros más destacados del show.

Y sí, parece que a los chicos les gusta el ruido. Y les gusta disfrutarlo, sentirlo en el pogo, en el mosh y poner en su boca esas frases contestatarias, cargadas de mensajes pacifistas para gritarlas como si fuera el último minuto de su vida. ¿O acaso eso no es lo que haría la mayoría de los chicos si se le acabara el tiempo?

“Terminamos con esa boludez de quién vino primero y quién no ¡eh!, les damos la bienvenida a todos. Esto lo hicimos para conocerlos mejor, gracias por venir”, lanzó CORVATA, y antes del anteúltimo as de la manga, como es “Sacate la mierda”, se despidieron junto a TERRY y ANDRES, prometiendo temas nuevos para su próximo show, a la vuelta de su gira por Cuba.

“Smells like teen spirit” de NIRVANA, fue el cover elegido por el trío para darle fin y coronar el show de la cuarta edición del Club Carajo, encuentro que destiló frescura y actitud adolescente desde las primeras horas de la noche (tanto arriba como abajo del escenario), y encuentro que promete crecer en cada una de las sucesivas ediciones.