RESEÑAS
Momento de meditación

El próximo año, la banda liderada por el cantante Christian Bertoncelli estará cumpliendo diez años de carrera, por lo tanto, para festejar dicho acontecimiento tienen pensado lanzar un DVD y disco en vivo. Para dicha producción decidieron grabar este concierto, que se transformó en un incentivo más para el público.
Paso errático
Desde las 18:45 pasaron por el escenario principal Lykeion, Lohengrin y Watchmen, que aprovecharon la ocasión para mostrar sus disímiles vertientes. Como era de esperar, los que obtuvieron mejores respuestas del público fueron los Watchmen, que fecha a fecha van acumulando nuevos seguidores. Su reciente y grandioso disco “Nowhere to hide” los hará crecer aún más.
No transcurrieron muchos minutos para que Renacer aparezca en escena. Si bien no había mucho clima de show en la previa, la introducción tampoco ayudó a generarlo. Si a ello le sumamos que el sonido durante la iníciales “Lenguas de serpientes” y “Bienvenidos al show” distaba mucho de ser el ideal, podemos afirmar que el arranque no había sido el soñado.
El defecto principal en el audio era que la banda sonaba despareja e insulsa, pero no por culpa de sus músicos sino por ciertos problemas técnicos evidentes. Sin lugar a dudas, esto se transmitió a los asistentes, quienes se sintieron afectados por estos inconvenientes.
Sin embargo, cuando todo estaba solucionado para la sexta canción, “Vida a los sueños y sangre al corazón”, se pudo percibir que ese no había sido el problema central. Es decir, la cuestión estaba en la falta de unión entre los músicos; se los observaba distantes y faltos de energía. En definitiva, no transmitían esa mística esencial para que el público quede alucinado.
“Uno parece medio parco, pero no saben lo importante que es para nosotros todo esto”, comentó Bertoncelli en un momento. Esta cuestión perjudicó a la banda durante toda su carrera, ya que a veces muchas personas se dejan enganchar por un cantante carismático y arengador, y no centran su atención en la voz y el talento para componer. Si Bertoncelli tuviera una imagen más atrayente, el éxito hubiera estado más cerca de él.
Cerca del desenlace llegó el momento más interesante del concierto, tanto por el sentimiento con la que interpretaron las canciones como por la locura que despertaron en sus fans. Si con “Espíritus guardianes” el clima emocional era óptimo, con “Guerrero inmortal” (tema homenaje a Osvaldo Civile) la pasión llegó a su punto más alto.
Después de la calurosa versión de “Hoy como ayer”, Bertoncelli comenzó a presentar a cada uno de sus músicos mientras sonaba la intro de la melodía de despedida, “Nueva sangre”. Cuando se vaticinaba un cierre súper caluroso, la tibieza acaparó nuevamente la escena, de tal modo que fue una despedida que sintetizó el resultado general del show. Quizás esa frialdad la repararon cuando salieron rápidamente a firmar autógrafos y a sacarse fotos.
Renacer es un grupo ultra profesional que cuenta con canciones híper gancheras y rifferas, que se transforman en irresistibles para cualquiera. Quizás los problemas mencionados pueden causar ciertos desganos en el espectador, pero cuando la banda ejecuta temas como “Entre la gloria y la traición”, “Alucinado”o “Senderos del tiempo” pasan a un segundo plano. De todos modos, deberían mejorar su escena para conseguir mayores logros.
Tenés que estar logueado para escribir un comentario Iniciar sesión