Un gran remedio

Desde aquel comentado concierto del jueves 25 de septiembre de 2008 en el ND Ateneo, Sacrum no tocaba en Capital Federal. Durante todo este tiempo, el grupo compuso, grabó y editó su segunda placa, “Days of quarantine”, la cual contiene 13 canciones (entre ellas, las tres incluidas en el single de 2008, “Survive”).

Más allá de que se formaron en 2003, la banda recién obtuvo un cierto reconocimiento cuando Mike Portnoy (baterista de Dream Theater) los eligió para abrir el primero de sus dos conciertos en el Luna Park, en marzo de 2008. Desde ese momento, su nombre quedó instalado en los amantes de la música progresiva. Sin embargo, sus casi nulas presentaciones no ayudaron a que se establezcan.

Durante 2009, su cantante Talo Silveyra fue el principal responsable de la escasa actividad, ya que estuvo trabajando en los Estados Unidos –se desempeña como actor-. Para este año, el grupo prometió más conciertos en vivo. Al menos ya está garantizada su gira por Holanda, donde estarán tocando en el reconocido festival de música progresiva, ProgPower Europe. Además se están por confirmar, para febrero y marzo, fechas en Mar del Plata, Montevideo y Santiago de Chile.

El Teatro Santa María no es un lugar muy utilizado por los grupos de rock, sobre todo porque su infraestructura está más preparada para obras de teatro, conferencias o charlas que para un recital. Sin embargo, para Sacrum reunía las condiciones necesarias para su propuesta. Sólo había que ver cómo manejarían la situación.

Sus seguidores tenían la posibilidad de verlos nuevamente con un show renovado, por lo que la ansiedad era evidente. Tal cual sucedió el año pasado, el grupo brindaría su particular espectáculo que fusiona música con actuaciones. El evento había dado comienzo desde la entrada misma al teatro, ya que los asistentes eran recibidos por dos agentes de SWAT. Una vez que todos estaban ubicados en sus asientos, Sacrum apareció en escena con las dos canciones que abren su nuevo disco: “Survive” y “Pressure”.

El conjunto integrado por Talo Silveyra (voz), Martín Guerrero (guitarra y coros), Agustín Acosta (batería) y Diego Cipolla (bajo), -además de Emanuel Pérez (tecladista-sintetizadores) como invitado-, estaba desplegando un audio impecable, poderoso y armonioso desde el primer acorde. Con las siguientes, “The Dream prisoner” y “The unknown”, no sólo lo ratificaron sino que se lo vio más distendidos.

Sacrum interpretó 11 de las 13 melodías de “Days of quarantine”. En este CD dejaron en evidencia que a pesar de mantener su base progresiva y pesada, sus sonidos tienen un tinte más dark y pop.

Entre ellos, tocaron el tema “Animal”, que es el primero editado en español. Hoy en día, el grupo está componiendo varias canciones más en nuestro idioma, tales como “El juego” y “Los otros”, las cuales fueron interpretadas durante el show del miércoles.

Las coreografías de mujeres sensuales, los agentes de SWAT recorriendo el recinto y demás cuestiones, acompañaban al show y le daban otra imagen a las melodías. Pasaron “Keeping me alive”, “Forbidden”, “Made as one”, entre otras. El público los despidió de pie, con ansias de verlos en poco tiempo.

Si el grupo tiene la posibilidad de mostrarse más en directo, seguramente tendrán una muy buena repercusión, debido a que cuentan con canciones muy logradas y con una escena fuera de lo común.